En las últimas décadas, España ha vivido una considerable bajada en la calidad del semen de sus varones. Diversos factores externos, así como la más tardía edad a la que se busca tener hijos, están convirtiendo la procreación en algo cada vez más difícil.
El semen, cada vez de peor calidad
Todos los estudios y los especialistas en la materia están de acuerdo: cada día el semen de los españoles es de peor calidad. En las últimas tres décadas se ha manifestado un progresivo deterioro en la calidad del semen en los varones españoles, debido en gran medida a factores externos, como el estrés, la alimentación, la polución o el consumo de alcohol y tabaco. También tiene una gran influencia en esta cuestión la cada vez más tardía edad a la que se pretende tener hijos. Por tanto, es un problema que se debe abarcar de una forma global. Según las asociaciones de urólogos, para tratar cualquier tipo de disfunción sexual hay que prestar atención al resto de síntomas que pueda presentar el paciente, ya que el problema sexual siempre tiene detrás otros conflictos de salud.
Problemas de infertilidad
Engendrar es siempre cosa de dos, así que los problemas a la hora de concebir un hijo pueden venir por las dos partes. Según la estadística, en la mitad de los casos el problema está en el hombre, y en ese caso, casi siempre está relacionado con la mala calidad de su semen. Sin embargo, en muchas ocasiones, los urólogos no conocen las causas que provocan esto, por lo que no pueden realizar un tratamiento que sea eficaz. Por ello, normalmente las soluciones suelen desembocar en la reproducción asistida. Además, a esto se une que, aunque cada vez es mayor el número de hombres que acuden al médico por un problema relacionado con su sexualidad, todavía hay muchos a los que la vergüenza y el orgullo les impiden acudir al especialista. De hecho, se calcula que un 60 por ciento de los hombres con algún tipo de disfunción sexual no va al médico para solucionar su problema. Por otro lado, no es solo importante tratar los problemas con el médico para poder tener una vida sexual plena, sino que estos además pueden ser síntoma de otras dolencias más graves, como las cardiovasculares.
Mejorar la calidad del semen
Por suerte, existen formas para mejorar la calidad del semen. En primer lugar hay que evitar los factores de riesgo, como el consumo de grasas saturadas, el exceso de alcohol y de tabaco, o el estrés. Por otra parte, es bueno consumir cantidades importantes de vitamina C durante un tiempo antes de intentar procrear. Además, estudios recientes han demostrado que la eyaculación frecuente consigue mejorar las tasas de espermatozoides sin ADN fragmentado.
